jueves, 29 de enero de 2009

Galoshes



Primer eco.

Una onza de nieve transformada en un halo de agua, transformado en chicle húmedo que se pega a tus zapatos de hule. Escucho ese aplauso indirecto creado por las suelas de tus pasos mientras avanzan sobre el piso encerado, splosh, splosh. Me arrebata de la lectura ensimismada de un libro criptográfico (porque esconde lo evidente, o porque esconde mi mirada) y examino el hule urgido de tus botas, negras con suela roja, el color que mejor te queda, lo descubrí en una foto donde tu pecho aparece dibujado por un jeroglífico (a la distancia) críptico, indescifrable salvo por tus labios de felicidad.

Te cuento y te reencuentro, y hablamos sosegados por la visión, un encuentro ejemplar, primoroso, lleno de sonrisas rutilantes y observaciones acerca del zodíaco y cartas astrales, la utilidad de las mentiras, una ciudad (todo un país) atado a un río, los veredictos acerca de la utilidad de las citas, todo un testimonio silente acerca de lo que no decimos y pensamos y queremos sentir, como el zen que promulga la inocencia y nos eleva sobre la turba de degenerados que discuten mitocondrias y cabezas de ganado (¿los ciervos cazados son ganado?).

Y al final, la descripción de lo que se desea, remover las botas de hule de una manera, digamos, significativa, que obvie la inocencia del momento y nos laude con sus destellos de realidad reprimida (eso que llaman los deseos)…

Segundo eco.

Un suspiro reprimido, un adiós sin beso, porque qué más arriesgado, pienso, que la proximidad corporal durante los días atroces del invierno.


Georges DiStefano Folly
Libro de los miedos ausentes

1 comentario:

Antigonum Cajan dijo...

Quelepuedodecir? Como direccion de internet, sin los puntos?

Siempre intento decir algo
sin que medie el
yo, el credito..

Preferiblemente sobre el medioambiente
la ecologia..
Como en LAOTZU..
que somos
seremos sin
el contexto que
nos permite comer/tomar/respirar?

Agua y sal........