sábado, 29 de agosto de 2009

Sótano



Es inexplicable saber cómo los sentimientos que uno más atesora salen a la luz, como los contenidos de la caja de Pandora, en momentos inesperados.

Momentos de fuga pasionaria, de vegetar intelectual, de raciocino pecaminoso. Son los momentos en que el sótano de los sentimientos, localizado en lo más profundo del ser, permanece sin guardia, y, con el rechinar de goznes un poco enmohecidos, se abren las compuertas y los sentimientos afloran, como pétalos en primavera, o huracanes en agosto.

Hoy, los sentimientos salieron durante la cobertura televisiva de la misa de resurrección por el alma de Ted Kennedy. El senador por Massachusetts falleció la semana pasada a causa del cáncer del cerebro que se le diagnosticó hace un año.

Me quedé pensando e imaginando mis momentos finales, donde habrán lágrimas (espero pocas) y sonrisas (espero muchas) y medité que de eso se trata la vida: no preocuparse tanto por el final, que total es el mismo para todos, el pobre y el rico, el débil y el poderoso, el cruel y el bienaventurado.

Es concentrarse en lo que queda dentro del paréntesis de la vida y disfrutar de los momentos que nos otorgan los latidos del corazón.

Y con eso, cerré la bodega, hasta la próxima ocasión.

1 comentario:

MILLY NAZARIO dijo...

ESA ES LA VIDA. ME GUSTO MUCHO. LOVE. MILLY