jueves, 7 de mayo de 2009

El padrecito manoseador


Se reportó anoche en el noticiero de las once que agarraron a un sacerdote manoseando a una mujer bastante caderona ante las aguas turquesas de Miami Beach.


Nada nuevo. Los sacerdotes son tan humanos como tú y yo, y que uno sucumba a la tentación, pues no es gran cosa. Total, si los dejaran casar, a lo mejor son mejores consejeros espirituales.


A este padrecito lo condenó la arrogancia. Guapo, de sonrisa telegénica, el padrecito escribió libros, y fue entrevistado por Cristina, Don Francisco y Oprah. El padrecito pecó de soberbia, se le olvidó que es un simple representante, no una deidad encarnada. Se le olvidó que los sacerdotes no deben ser figuras de farándula. Su ego se lo recordó.


Pero lo que me molestó no fue la noticia en sí, sino que, en medio de tantos problemas, en medio de la crisis financiera; en medio de la epidemia de gripe; en medio de crecientes tensiones sociales y políticas en Pakistán, en Afganistán, en Irán, en Corea del Norte, el noticiero gastara más de diez minutos cubriendo la noticia del padrecito manoseador.


Y claro, me molesto conmigo mismo, por darle la importancia que no merece en este blog….

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Estaba leyendo... más bien haciendo una búsqueda de escritores en la diáspora (tengo un informe mañana en la Universidad de Tato Laviera), lo encontré a usted y realmente me parece excelente

Anónimo dijo...

Estaba leyendo... más bien haciendo una búsqueda de escritores en la diáspora (tengo un informe mañana en la Universidad de Tato Laviera), lo encontré a usted y realmente me parece excelente

Johanny Vázquez Paz dijo...

A mí lo que me molesta es que la noticia del grupo de puertorriqueños que entró cantando Alabanza, alabanza...(gracias, Corretjer)al Congreso (que es lo más romántico y emocionante que ha pasado desde que recuerdo) no salió en los medios noticiosos anglos y, sin embargo, la noticia del Padre Alberto estaba en todos partes. De ésta saca otra vez un programa de televisión, ja!. Me ha sorprendido que tanta gente lo apoye y esté hablando en contra del celibato. La Iglesia Católica debe estar de fiesta...